El trato humano y cercano del dueño, la limpieza impecable, la decoración encantadora, ubicación ideal para visitar Bilbao, San Sebastián y Urdaibai, se puede ir caminando al pueblo.

Me sentí muy bien, no tengo ninguna pega.

mi segunda estancia en Guerricaiz fue aún mejor gracias a la maravillosa Casa Rural Garro. La ubicación es perfecta para desconectar y explorar Euskadi. La hospitalidad de Jose Ángel fue excepcional, ofreciendo recomendaciones y estar disponible durante toda mi estancia. La habitación era preciosa, cómoda y limpia. 100% recomendable.

ruido entre habitaciones.

El caserío está ubicado en una zona espectacular y rodeado de naturaleza. El trato del dueño es amable, servicial y detallista.La casa está bien decorada y las habitaciones están limpias y ordenadas.El anfitrión es muy interesante y nos recomendó sitios buenos para visitar.El desayuno es completo y delicioso, con productos locales.La atmósfera de la casa es relajante y especial.

Me sentí muy bien, no he tenido ningún inconveniente.

La decoración rústica y buen gusto destacan. Desayunos espectaculares con amigable conversación. Anfitrión amable y acogedor. Conversaciones culturales y recomendaciones útiles. Tranquilidad y naturaleza abundantes.

Habitación limpia, cambio de toallas diario. Desayuno completo, atención excepcional. Buena ubicación para explorar diferentes lugares cercanos. Ruta de senderismo recomendada. Hermosa terraza disponible. Repetiríamos sin dudarlo.

Destacamos la acogedora y limpia habitación, con toallas cambiadas a diario y una limpieza impecable. El desayuno fue muy rico y completo, con una atención inigualable por parte del personal. La ubicación del hotel nos permitió desplazarnos fácilmente a diferentes lugares de interés en la zona. Además, cabe destacar la hermosa terraza disponible para descansar y relajarse, así como las recomendaciones y la sonrisa del amable personal.

No hay nada malo que decir.

La preciosa casa rural en un entorno bonito. El desayuno abundante y variado. La atención amable y atenta del personal. Las tartas caseras deliciosas. Las recomendaciones útiles de José Ángel.

Todo estupendo.

Todo, la casa es preciosa, cómoda, limpia, silenciosa; el entorno una maravilla, con un precioso arroyo que era el único sonido apreciable junto con el de los pájaros y qué decir del anfitrión. Destacar además la calidez de los espacios y el buen gusto para crear un ambiente acogedor en todos los detalles de la casa. Sensacional emplazamiento que nos permitió visitar con mucha comodidad la zona. El mismo entorno en el que se encuentra merece la pena ser visitado en detalle. Es ideal para descansar y relajarse desde su maravillosa terraza con el sonido del arroyo que discurre. Han sido cuatro días inolvidables que hubiésemos querido prolongar. Repetiremos sin dudarlo. La casa está llena de detalles de buen gusto y que hacen que la estancia sea muy confortable. El anfitrión es una persona excepcionalmente atenta y amable, siempre pendiente de tus necesidades. La habitación y el baño estaban impecables, se nota que se cuida al detalle. El desayuno era delicioso y completo, y poder disfrutarlo en la terraza era un verdadero lujo. Además, la ubicación es perfecta para explorar diferentes lugares de interés turístico, como las playas de Laga y Lekeitio, Zarautz y San Sebastián. hay restaurantes cercanos con comida casera deliciosa. En resumen, una experiencia genial que repetiré sin duda.

Recomendaría este lugar sin ninguna duda.

¡La pasamos genial en nuestro año nuevo en esta casa rural! Lo que más nos gustó fue la ubicación privilegiada en un paisaje increíble y relajante. Además, el trato del dueño fue muy amable y atento, nos hizo sentir como en casa. Otra ventaja que disfrutamos fue la deliciosa comida que nos ofrecieron, con desayunos espectaculares y conversaciones entretenidas con los otros huéspedes. Sin duda, fue una experiencia única y especial.

Caserío espectacular y encantador. Ubicación excelente para explorar Euskadi.- Hermoso entorno natural con abundante vegetación y agua.- Amabilidad y familiaridad del personal.

No había nada que no me gustara.

Mi estancia en Casa Rural Garro fue simplemente maravillosa. Durante mi viaje de 4 días buscaba tranquilidad y relajación, y José Ángel, el dueño, hizo que todo fuera tan fácil. de recomendarme lugares cercanos para visitar, su cercanía y amabilidad fueron excepcionales. La ubicación de la casa en medio del campo, con un riachuelo y sin ruido, era simplemente idílica. La casa estaba llena de detalles de buen gusto y la terraza era una delicia. La cama era muy cómoda y el baño amplio y con bañera. El desayuno fue maravilloso, con una amena compañía y conversaciones sobre cine de autor. Fue una estancia inolvidable gracias a la dedicación de José Ángel como anfitrión.

Recomendaría este lugar.

La ubicación de este lugar es ideal para aquellos que desean escapar del bullicio de la ciudad y disfrutar de la tranquilidad de la naturaleza. Con un riachuelo justo al lado de la casa, puedes relajarte y bañarte en sus pequeños remansos. Además, el pueblo está a solo unos minutos de distancia, lo que te permite disfrutar de servicios de restauración cercanos. También mencionar el desayuno servido por el anfitrión, que es ameno y entretenido gracias a sus interesantes anécdotas.

El único inconveniente que encontré fue la falta de insonorización en la casa. Pude escuchar a las personas como si estuvieran en mi propia habitación, lo que perturbó mi descanso.

Casa rural en mitad del bosque. Dueños atentos y disponibles. Uso de cocina y terraza. Entorno inmejorable. Situación estratégica para visitar Vizcaya y Guipuzcoa. Alojamiento limpio y bonito. Trato excelente por parte del propietario. Desayuno excepcional

Nada de nada.

La habitación era muy acogedora y siempre estaba impecable, con toallas limpias cada día. El desayuno era delicioso y tenía una gran variedad de productos. El personal era excepcionalmente atento y amable. Además, la ubicación era ideal para explorar diferentes lugares, con hermosas playas a solo 35 minutos en coche y ciudades como Zarautz y San Sebastián a aproximadamente una hora.

No había nada que no me gustara.